El artista surcoreano, Eok Seon-kim, afincado en Madrid desde hace años, sigue con su evolución creativa y ahora, en su reciente exposición en la galería de Pep Llabrés, en Palma de Mallorca, refleja desde un punto de vista “natural” un mundo cambiante, que se transforma vertiginosamente, cuya generación de imágenes también se ha convertido en algo rápido, asequible, cotidiano, donde la armonía y el equilibrio se restablece a través del Ying-Yang.
Su evolutiva obra nos lleva asumir un papel más elevado, intentar disponer de la imaginación infinita del ser humano hacia nuevas experiencias con una perspectiva más esencial para adaptarnos a estos tiempos tan cambiantes que supondrá volver a adaptarse y encajar en generaciones futuras. En suma, la energía Yin-Yang en la naturaleza restablece el equilibrio y la armonía y hace evolucionar el universo eternamente, donde “transformar” se presenta pues como una reconciliación espiritual que forma parte de la naturaleza, naturalmente.
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