Galería Fúcares_Madridwww.fucares.com  Rubén Ramos Balsa"El lago vertical" Exposición individual en la Galería Fúcares de Madrid. Inauguración: 28 de enero de 2012. Hasta el 3 de marzo de 2012.  La Galería Fúcares presenta en su espacio de Madrid la segunda exposición individual de Rubén Ramos Balsa (Santiago de Compostela, 1978). Discusión entorno a La estructura ausente de la apariencia desnuda. El lago verticalNotas para una introducción al problema. Umberto Eco abre la discusión entorno al problema. Cuatro contertulios atemporales discuten alguno aspectos del asunto:  - comunicar dos aparatos mecánicos- (Eco) Si todo fenómeno cultural es un acto de comunicación y puede ser explicado mediante los esquemas propios de cualquier acto de comunicación, será conveniente individualizar la estructura elemental de la comunicación donde ésta se produzca -o, mejor dicho- en sus términos mínimos. Es decir, al nivel en que se produce un paso de información entre dos aparatos mecánicos. (Arnheim) Si no se sitúan simétricamente uno del otro, se favorecería su fusión y potenciaría el todo, y de tal manera invertidos. Esta coincidencia de ser simultáneamente todo y parte es otro aspecto de la interacción no representable en una formulación discursiva. (Derrida) Sería fácil mostrar que el concepto de estructura e incluso la palabra estructura tienen la edad de la episteme, es decir, al mismo tiempo de la ciencia y de la filosofía occidentales, y que hunden sus raíces en el suelo del lenguaje ordinario, al fondo del cual va la episteme a recogerlas para traerlas hacia sí en un desplazamiento metafórico. (Paz) En el arte lo único que cuenta es la forma. O más exactamente: las formas son las emisoras de significados. La forma proyecta sentido, es un aparato de significar. - estructura y centro- (Arnheim) Percibir un objeto o suceso cualquiera significa verlo como configuración de fuerzas, y el tener conciencia de la universalidad de tales configuraciones es parte integrante de toda experiencia perceptual. (Derrida) la estructura, o más bien la estructuralidad de la estructura, aunque siempre haya estado funcionando, se ha encontrado siempre neutralizada, reducida: mediante un gesto consistente en darle un centro, en referirla a un punto de presencia, a un origen fijo. Este centro tenía como función no sólo la de orientar y equilibrar, organizar la estructura -efectivamente, no se puede pensar una estructura desorganizada- sino, sobre todo, la de hacer que el principio de organización de la estructura limitase lo que podríamos llamar el juego de la estructura. Indudablemente el centro de una estructura, al orientar y organizar la coherencia del sistema, permite el juego de los elementos en el interior de la forma total. Y todavía hoy una estructura privada de todo centro representa lo impensable mismo. (Arnheim) La mente no puede sustentar dos organizaciones estructurales diferentes del mismo esquema a la vez: no puede hacer otra cosa que subordinar la una a la otra. En consecuencia, la mente aporta la jerarquía necesaria concediendo alternativamente el predomino a cada una de las estructuras. En un instante dado prevalece el todo, al siguiente las partes. Tal oscilación hace que sea posible presentar la identidad sin mengua de la dualidad. - Fuerza y movimiento - (Da Vinci) Observa cómo el movimiento de la superficie del agua se asemeja a la de los cabellos, los cuales tienen dos movimientos; de ellos, uno depende del peso del pelo; el otro, de la dirección de los bucles. Así también forma el agua sus torbellinos, de los cuales una parte atiende al ímpetu del curso principal; la otra, al movimiento incidente o reflejo. (Arnheim) Un borde circular siempre está en tensión, como la piel de un globo, que soporta la presión centrífuga del interior y genera una contrapresión centrípeta por su resistencia a la expansión (Paz) El cuerpo de la realidad, su apariencia, es el resultado de dos fuerzas: atracción en el espacio y distracción en la extensión. La apariencia se extiende y se aleja de su punto de atracción: nosotros, espejos que la reflejamos. El mismo movimiento se despliega en el tiempo: su cuerpo goza de una libertad alternativa con respecto al centro de gravedad. Durante ciertos intervalos, el cuerpo es libre y no obedece a la atracción; durante otros está determinado por ésta. Mientras duran eso intervalos, el cuerpo está fuera del tiempo. Al menos fuera del tiempo lineal. La apariencia se fuga entre las manecillas del reloj: es un péndulo visto de perfil. (Arnheim) Los dos elementos se complementan mutuamente a todos los niveles del circulo. Allí donde uno es estrecho el otro es ancho, y así a lo largo de toda la gama de proporciones. (Da Vinci) Así como la piedra que al agua fue arrojada se hace centro y motivo de numerosos círculos y así como el sonido se difunde en círculos a través del aire, así también un cuerpo dispuesto en el aire luminosos se expande circularmente y colma a las partes circundantes de sus infinitas imágenes, pareciendo completo en el todo y completo en la menor de sus partes. (Arnheim) El todo no es una entidad que exista separadamente de las partes y sea anterior ellas, ni tampoco las partes existen separadamente del todo ni son anteriores a él. Las dos familias de vectores, la que desciende desde el todo y la que asciende desde las partes, se constituyen en relaciones lineales artificialmente aisladas entre entidades separadas, estáticas. (Da Vinci) Si un solo punto situado en un círculo puede ser origen de infinitas líneas, y el límite de las infinitas línea que divergen de tal punto lo constituyen infinitos puntos que, sumados, vuelven a ser uno, concluiremos que la parte es igual al todo. (Paz) la persecución de un objeto que se aleja infinitamente implica un movimiento igualmente sin fin. Este movimiento metafísico, a diferencia del material, no puede ser sino perpetuo y, por tanto, circular. Una carrera en la que el sujeto alcanza a su objeto sólo para desprenderse de él y correr de nuevo en su busca. (Da Vinci) 1. La superficie es el límite del cuerpo. 2. El límite del cuerpo no es parte de ese mismo cuerpo.4.el límite de un cuerpo es principio de otro cuerpo. 3. Lo que no es parte de cosa alguna nada es. Nada es lo que nada ocupa. (Paz) la condenación de ver se convierte en la libertad de la contemplación.